No solo Marie Kondo representa al canon japonés de orden y minimalismo. Hay otras personas y corrientes, también nacidas en el país oriental, que nos guían por la senda de menos, es más ¿Conocen del Danshari? Acá les contamos sobre las 5 reglas para aplicarlo en sus casas.
Como no reconocer que ‘botar o no comprar lo que NO necesitamos’ es un arte. Porque en la sociedad actual no solo tenemos que lidiar con el constante deseo de necesitar más si no que también con la falta de tiempo (y de determinación) para deshacernos de eso que nos sobra en el momento adecuado.
El término Danshari nació de la mano del autor nipón Hideko Yamashita en su libro: El Arte de Botar. Y se fundamenta en 3 principios:
- No dejarse tentar por las cosas innecesarias
- Deshacerse de las cosas inútiles que ya tenemos
- Desarrollar un radar para frenar el deseo de adquirir o acumular lo que no nos sirve
Volver a lo simple: manos a la obra con Dashari
En muchos casos acumular (no coleccionar) nos produce un cierto grado de culpa, sobre todo cuando eso significa: desorden y caos. Ya no se trata de atesorar objetos que valoramos, si no aferrarse a eso que no podemos dejar ir. Cuando tenemos esa sensación respecto a los espacios de nuestra casa, quizás, es momento de plantearse el método Dashari.
¿Cómo hacerlo? Acá les dejamos 5 claves para hacer parte de su día a día este estilo de vida minimalista:
- Mira tu casa ¿te produce una sensación de paz y tranquilidad? No importa si es colorida o super beige, recargada o zen…un espacio nos debe hacer sentir en calma, cómodos. Si tu casa llena tu cabeza de preocupaciones es momento de darle una vuelta y preguntarte: de qué es lo puedo prescindir. Seguro, si eres honesto, son muchas más cosas de las que creías.
- No llenes nada al máximo. Ni clósets, ni despensas ni mesas de arrimo… ¡nada! Usa como máximo un 80% de tu espacio disponible. Eso te mantendrá constantemente dentro de los ‘límites’ de la acumulación innecesaria.
- Marie Kondo, según Dashari, nos compartió una gran verdad: debemos conservar eso que nos hace felices. Si algo te trae buenos recuerdos, una sonrisa o simplemente te hace feliz al mirarlo… ¡quédatelo!
- Saca de tu cabeza el concepto de “por si acaso”. Es muy probable que NADA, nada de lo que hayas guardado con ese objetivo finalmente haya cumplido su propósito más que llenar espacios necesarios de tu casa.
- Y, por último, busca doble funcionalidad. Si un objeto ‘práctico’ de tu casa cumple doble función: será doblemente valorado según esta técnica que favorece el menos es más.