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Felipe Santander: Arquitectura sustentable de exportación

Felipe Santander: Arquitectura sustentable de exportación

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Felipe Santander (38), arquitecto chileno que por estos días está dando que hablar por su trabajo en los Montes Apalaches en Carolina del Norte (USA), donde junto a su socio Greg, ganaron el premio al diseño más innovador de la Asociación de Constructores de Viviendas de Asheville por la «Casa Fenner». Todo un reconocimiento que tiene a Santander como un visionario, que entiende la arquitectura como una parte integral del entorno y no al revés, donde la naturaleza juega un rol protagónico, tan o más importante que la estructura de cualquier cimiento.

Por: Cristóbal Venegas / @mupi_cris

Si el río suena es porque piedras trae. Y esa podría ser la premisa para hablar de Felipe Santander (38), arquitecto chileno que por estos días está dando que hablar por su trabajo en los Montes Apalaches en Carolina del Norte (USA), donde junto a su socio Greg, ganaron el premio al diseño más innovador de la Asociación de Constructores de Viviendas de Asheville por la «Casa Fenner». Todo un reconocimiento que tiene a Santander como un visionario, que entiende la arquitectura como una parte integral del entorno y no al revés, donde la naturaleza juega un rol protagónico, tan o más importante que la estructura de cualquier cimiento.



Especialista en hogares ecológicos, Santander es pionero en el diseño y construcción de casas que sacan el mayor provecho al entorno y donde la eficiencia energética es el objetivo principal. El sello de su empresa Earthtone Design Studio es justamente crear proyectos innovadores que sean hermosos, funcionales y que se integren armoniosamente con la naturaleza. “Honramos el proceso de colaboración compartido con nuestros clientes, con la convicción de que los mejores diseños cobran vida a través de un esfuerzo colectivo” añade.


Casa Fenner, ganadora al mejor diseño innovador


Hace 9 años se mudó definitivamente a Estado Unidos junto a su mujer Rebecca, originaria de NY; primero a San Francisco y luego a Carolina del Norte, donde conoció a su partner Greg McGuffey con el que desarrollaron este proyecto, inspirados en brindar una mayor calidad de vida a sus clientes, los que día a día son más, debido al despertar social y consciente de que el planeta está en serios problemas y necesita de un cambio sustancial para asegurarles un futuro a las próximas generaciones.


Hoy vive junto a su mujer y sus hijos, Nicolás (5 años) y Sebastián (2 años) en una increíble casa rodeada de huertos y naturaleza, el escenario que cualquiera que habite en una selva de cemento (como yo) envidaría con ganas. Es más, confieso que paso varios minutos al día viendo su Instagram (@felipe_santander), soñando con esos huertos sustentables y casas que –si tienes un ojo estético desarrollado- seguro te van a emocionar.



Rodeado de naturaleza, arquitectura y sin descuidar el interiorismo en sus proyectos, Felipe Santander, puede ser la respuesta más cercana a la esperada renovación arquitectónica, al punto que podríamos hablar de la neo arquitectura y el inicio de un paradigma ecológico necesario para estos tiempos de tanto plástico.

Permacultura

Todo partió cuando Felipe estudió Permacultura en California; una disciplina de diseño agrícola y social, político y económico basado en los patrones y las características del ecosistema natural. “Fue ahí cuando sentí que despertaba. En Chile nunca me habían hablado del tema y de pronto me veo aprendiendo sobre agricultura urbana, agronomía regenerativa y diseño sustentable. Mientras estudiaba unos de mis profesores se interesó en mi trabajo en previo como arquitecto en Chile y me preguntó si me interesaría diseñar huertos urbanos y paisajes comestibles. Era un mundo nuevo. Algo que no tenía nada que ver con lo que venía haciendo, pero que en verdad tenía TODO que ver”.



Antes de irte, desarrollaste proyectos acá; cuéntame sobre eso

Trabajé dos años en la oficina WMR Arquitectos, donde tuve la oportunidad de tener excelentes maestros. Felipe Wedeles y Jorge Manieu pertenecen a una generación muy talentosa de arquitectos; y haber desarrollado proyectos con ellos fue una tremenda escuela. De ahí me cambié a una oficina más grande. Una consultora de ingeniería holandesa, participando en proyectos de mayor escala. Ahí mi rol no sólo era de arquitecto diseñador sino también coordinador de proyectos. Diseñamos aeropuertos, edificios para las Fuerzas Armadas y hasta un observatorio astronómico para un cliente norteamericano.

¿Y en qué momento comenzaste a proyectar tu carrera en Estados Unidos?

Mi señora es de Nueva York y nos conocimos en Chile mientras ella estudiaba español. Luego ella postuló a un trabajo en San Francisco, California, lo que abrió una oportunidad para poder venir a probar suerte y poder aprender cosas nuevas. En ese entonces yo trabajaba en el proyecto del observatorio astronómico y los clientes eran unos científicos de Tucson, Arizona, por lo que ya me sentía bien cómodo con el idioma y sentía que todo iba guiando en esa dirección.



La Neo Arquitectura

El tema de la sustentabilidad es el centro de tus diseños ¿De qué manera podemos incorporarla y cuáles son las ventajas que tiene por sobre otro tipo de arquitectura?

Me pasa que la sustentabilidad como tema me parece algo elemental. No sólo aplicable a la arquitectura sino también a nuestras vidas. Sustentabilidad no sólo pasa por instalar paneles solares, sino también por una actitud personal frente a la naturaleza y como te relacionas con ella. Tener un compost, un huerto o un simple macetero con un tomate es un gesto hacia la sustentabilidad. Acá con el diseño de nuestros proyectos intentamos lograr certificación Net Zero Energy. A través de soluciones naturales y mecánicas la casa produce la suficiente energía para auto abastecer su consumo eléctrico. Por ejemplo, que los paneles solares sean capaces de utilizar la energía natural del sol para cargar baterías, las cuales se usan para la calefacción en invierno y aire acondicionado en verano.

Es como una arquitectura integral, que además me imagino tiene una mirada propia…

Acá decimos que nuestra arquitectura es “Naturally Modern” (natural y moderna). Líneas simples y modernas que integran materiales naturales y rústicos. La sustentabilidad y eficiencia energética es una prioridad y eso los clientes los saben al momento de contactarnos. Intentamos maximizar el uso de energía solar, ventilación natural y el uso de materiales reciclables.

 


“Una casa sustentable maneja y conserva las aguas lluvias, incorpora el huerto como parte del diseño del paisaje, se potencia el uso de energía solar y ventilación natural”.



Más allá de lo práctico y lo derechamente sustentable, en tu diseño (y aplicación) también va muy de la mano lo estético. ¿Cómo logras darle a tus diseños un espacio para desarrollar el interiorismo?

Creo que la clave para un buen diseño es entender bien lo que busca el cliente. Darle forma a su visión y sus propias ideas. Intentamos incluir materiales naturales y buscar esa combinación entre lo rústico y lo moderno. Me encanta la parte de interiorismo porque cuando estoy diseñando cada proyecto siento que lo estoy viviendo. Cuando proyecto una cocina o un baño, me imagino utilizando ese espacio, dónde están las mejores vistas, cómo se integra con el resto de la casa, etc.

 


Un diseño que me gusta mucho es la casa A-frames o tipo A, ¿Tienen alguna ventaja en especial?

Tienen ventajas y desventajas. Al final pasa más por las preferencias del cliente, sin embargo igual hay diferencias con una casa tradicional. En una casa tipo A, no hay muros exteriores, es un gran techo, por lo que hay ahorro de materiales y tiempo de construcción. Con una casa tipo A uno tiene que ser muy creativo al usar el espacio, sacándole el jugo a cada centímetro cuadrado. Las casas tipo A en general tienen menos ventanas, y eso puede ser positivo desde un punto de vista de eficiencia energética.




¿Es aplicable en Chile el trabajo que están desarrollando allá o es más difícil?

Ciertamente, y sí, es una cuestión de tiempo. Yo creo que en Chile la arquitectura es bastante más vanguardista de lo que se hace acá, sin embargo acá los procesos constructivos son más automatizados. Lo que hacemos acá no es muy distinto a lo que hacía en Chile y si bien el tema de la sustentabilidad es fundamental para nosotros, hay varias oficinas en Chile que tienen mucha conciencia ecológica.



¿Alguna opinión sobre la arquitectura en Chile vs lo que está pasando afuera?

Yo creo que en Chile está todo pasando. Tenemos arquitectos increíbles y escuelas de arquitecturas que están dentro de las mejores de América Latina. Alejandro Aravena, ganador del premio Pritzker es una muestra de lo bien que se están haciendo las cosas por allá. Pero si bien existen arquitectos y diseñadores sumamente talentosos, también nos encontramos con la otra cara de la moneda, con edificios de departamento que no necesariamente cuentan con buena calidad espacial.

Mil por ciento de acuerdo!

Esa obsesión de forzar al máximo los metros cuadrados me parece que no aporta mucho al diseño de vivienda ni al urbanismo. Espero pronto en las escuelas se empiecen a impartir clases de permacultura y así crear más conciencia sobre arquitectura sustentable, agricultura urbana y como está todo conectado.




Gracias Felipe por esta entrevista y compartir tu trabajo con nosotros! Si estás en llamas por saber más de este tema y quieres llevar la permacultura a tu hogar (y de paso ayudar al planeta), puedes visitar la página personal de Felipe Santander o revisar sus trabajos en . Ah! O también seguirlo en Instagram @felipe_santander .

Etiquetas: Diseño